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10 tips para identificar pescados y mariscos frescos durante la Cuaresma
Durante la Cuaresma, el consumo de pescado y mariscos aumenta considerablemente. Con estos 10 consejos, podrás elegir productos frescos y evitar fraudes en el mercado.
La Cuaresma es un periodo litúrgico en el que millones de personas, especialmente de tradición católica, evitan el consumo de carne roja y optan por el pescado y los mariscos. En 2025, la Cuaresma comienza el miércoles 5 de marzo con el Miércoles de Ceniza y finaliza el jueves 17 de abril, antes del inicio del Triduo Pascual. Durante este tiempo, los viernes son días de abstinencia de carne, lo que genera un incremento en la demanda de productos del mar.
Este aumento en el consumo suele venir acompañado de prácticas fraudulentas en mercados y supermercados, como la venta de especies más baratas bajo nombres de pescados de alto valor, o la comercialización de productos que han perdido frescura. Para asegurarte de que estás comprando pescado y mariscos en óptimas condiciones, sigue estos 10 consejos esenciales.
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1. Ojos brillantes y saltones
Los ojos del pescado deben ser cristalinos y ligeramente saltones. Si están opacos o hundidos, significa que el pescado ha estado almacenado por varios días y ha perdido frescura.
2. Branquias de color rojo intenso
Las branquias frescas tienen un color rojo vivo o rosado intenso. Si lucen marrón o grisáceas y tienen mucosidad, el pescado ya ha comenzado su proceso de descomposición.
3. Olor a mar, no a amoníaco
El pescado y los mariscos deben oler a mar, con un aroma fresco y limpio. Si detectas un olor fuerte a amoníaco o podrido, evita comprarlo, ya que indica descomposición.
Pescados y mariscos frescos
4. Piel firme y escamas adheridas
La piel del pescado debe ser brillante y húmeda, sin partes resecas o descoloridas. Las escamas deben estar bien adheridas al cuerpo y no desprenderse con facilidad.
5. Carne firme y elástica
Presiona la carne con un dedo. Si vuelve a su forma original rápidamente, está fresco. Si la huella del dedo permanece marcada, el pescado ha perdido calidad y frescura.
6. Mariscos vivos y activos
Las almejas, mejillones y ostiones deben estar vivos al momento de la compra. Golpea ligeramente su concha: si se cierra, está vivo. Si permanece abierta, ya no es seguro consumirlo.
Marisco fresco.
7. Patas y antenas completas en crustáceos
Los camarones, langostas y cangrejos deben tener un color brillante y sin manchas oscuras. Sus patas y antenas deben estar completas y sin signos de deshidratación.
8. Agua de conservación limpia
Si compras mariscos en agua, asegúrate de que esté transparente y sin espuma. Un agua turbia o con residuos indica que los productos ya han comenzado a deteriorarse.
9. Evita los filetes con coloración extraña
Si compras pescado fileteado, revisa que la carne tenga un color uniforme, sin bordes secos o manchas oscuras. En pescados blancos, la carne debe ser translúcida, y en pescados rojos como el atún, de color vibrante sin zonas marrones.
10. Cuidado con el fraude del pescado
Algunas especies económicas se venden como variedades más caras. La basa suele comercializarse como mero y el pez escolar como robalo. Compra en mercados confiables y verifica las características del producto.
