Avanza promoción de turismo de reuniones en los distintos estados del país

El sector de turismo de reuniones, denominado MICE (Meetings, Incentives, Conventions & Exhibitions) se consolida como un potencial motor para dinamizar las economías estatales en México, según los últimos datos del Barómetro de la Industria de Reuniones 2024, este rubro contribuye actualmente con el 1.83% al Producto Interno Bruto (PIB) nacional, con un crecimiento interanual del 11.47% señaló Michel Wohlmuth, presidente del Consejo Mexicano de la Industria de Reuniones (COMIR) en conferencia este miércoles.

En el caso particular de Puebla, sede del próximo XXXI Congreso Nacional de la Industria de Reuniones (CNIR 2025), las autoridades estatales proyectan una derrama económica superior a los 8,000 millones de pesos solo en eventos del sector, “el turismo de reuniones genera empleos mejor remunerados que el turismo tradicional, con un efecto multiplicador en restaurantes, transporte y servicios profesionales", explicó Víctor Gabriel Chedraui, secretario de Desarrollo Económico de Puebla.

Mesas de trabajo

Buró Mexicano de Convenciones y Congresos (BMCC), es una plataforma nacional para impulsar la atracción de eventos internacionales, su estrategia se basa en las vocaciones productivas de cada estado, “estamos trabajando con los gobiernos estatales para alinear sus ventajas competitivas, en el Norte turismo médico y tecnológico; en el Sur eventos de bienestar”, añadió la directora general de Innovación de Producto Turístico de la Secretaría de Turismo (Sectur) en entrevista.

El financiamiento combinará recursos federales, estatales y privados, las perspectivas para 2026 son alentadoras: con la implementación del Buró y la profesionalización de los destinos emergentes, Camacho Lozano, explicó que en esta primera fase de de reuniones, participan organizaciones como el COMIR, el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CENET), recintos especializados y representantes de destinos consolidados como Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, así como de zonas emergentes.

"Estamos analizando las capacidades y necesidades específicas de cada destino, no es lo mismo trabajar con ciudades con infraestructura consolidada que con pueblos mágicos o destinos emergentes, pero todos forman parte de esta estrategia nacional”, las mesas de trabajo del Buró continuarán en los próximos meses con hoteleros y dependencias como Migración y Aduanas, para definir un modelo operativo y financiero.

Las Sectur tiene como meta que México se encuentre entre los cinco principales destinos mundiales de turismo de reuniones “cada región aporta valor único, desde la conectividad de las grandes ciudades hasta la autenticidad de los pueblos mágicos”; se desarrollará un plan de promoción internacional que destacará las vocaciones regionales, siempre vinculadas a la capacidad de cada destino para albergar eventos de distintos tamaños, explicó Camacho.

“Estamos trabajando con un documento estratégico desarrollado por cerca de 300 líderes de la industria que contiene propuestas personalizadas para cada destino, ya sea emergente o consolidado", explicó Wohlmuth a este medio, el plan, que ya fue presentado a la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez, busca incrementar la captación de eventos internacionales adaptándose a las capacidades de cada región; el CNIR en Puebla será un foro para compartir los resultados y avances del Buró.

Sobre las expectativas de crecimiento, el líder del COMIR señaló que aunque actualmente el sector representa el 1.62% del PIB datos 2023, se proyecta un aumento del 15% al 20% una vez que entre en operación el Buró, “el financiamiento será clave y estamos evaluando opciones que combinen recursos públicos y privados, aunque la infraestructura seguirá siendo responsabilidad de cada entidad", aclaró.

Wohlmuth enfatizó que México cuenta con ventajas competitivas únicas para el turismo MICE, como la experiencia profesional, la diversidad cultural y la capacidad para eventos de distintos tamaños “el turismo trasciende fronteras y circunstancias políticas, la necesidad de reunirse presencialmente, que se reforzó tras la pandemia, sigue siendo nuestro mayor activo”.